viernes, 8 de octubre de 2010

Vázquez Montalbán



"Biscuter y Carvalho repasaron todos los álbumes de su saber y no figuraba en ellos el concepto de religión según Durkheim. A Paganel le gustaba sonreir mientras vencía.
- "Una religión es un sistema solidario de creencias y de prácticas relativas a las cosas sagradas." ¿Qué les parece? Obscenamente obvio, diría yo, porque se limita a describir una formalización de conductas, es puro sociologismo. Yo, en cambio, estoy más de acuerdo con Lucrecio o con Lenin. ¿Recuerdan cómo connotó Lucrecio la religión? ¿No? Para Lucrecio la religión es un sistema de amenazas y promesas que cultiva y desarrolla el fondo temeroso de la naturaleza humana, que abruma al hombre y lo incita a la revuelta contra la religión si es valeroso, y esa revuelta puede triunfar si el rebelde va armado de conocimiento científico y sabiduría filosófica. La lucidez de Lucrecio es portentosa. (...)
Biscuter se había ido con las aguas del Ganges, y Carvalho, con las de su propia educación sentimental, de la que formaba parte la oscura, asfixiante educación religiosa de la posguerra española, el nacionalcatolicismo como instrumento de la ideología vencedora para mutilar todavía más a los vencidos. Iluminó las facciones de Paganel cuando musitó:
- Saber es defenderse.
La frase se ganó el entusiasmo del geógrafo que, con los brazos alzados hacia el cielo, enrojecido por el poniente y la alerta de los vientos, pregonaba su fe en la inteligencia humana para que al menos una minoría de sabios pudiera salvarse de la conjura de estupidez y superstición que se cernía sobre la Tierra."

Manuel Vázquez Montalbán - Milenio I - Rumbo a Kabul




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